Hoy queremos compartir con ustedes algunos datos curiosos sobre el animal que inspira nuestro trabajo, y que nos enseña una serie de atributos que, a nuestro juicio, son determinantes para el desarrollo de la revolución 4.0, y en particular, para la minería inteligente.
Partamos con contar que el pulpo es uno de los animales más inteligentes que existen en la naturaleza ¿No nos crees? Pues mira este video:
En él se observa a un pulpo usando un coco hueco para transportarse, pero también para protegerse de depredadores, como si fuera una verdadera casa rodante. En ambientes de laboratorio también han demostrado habilidades excepcionales para resolver problemas complejos a que los exponen los científicos, como por ejemplo buscar comida escondida o escapar de sus acuarios, siempre evidenciando que son capaces de lograr algo reservado para un reducido número de especies: planificar el futuro.
¿Cómo lo logran? ¿En qué se basa su inteligencia?
A diferencia de otras especies como los delfines, elefantes y simios, el origen y la evolución de la inteligencia del pulpo aún es causa de misterio y controversia. Diferencias físicas relevantes, como por ejemplo el hecho de que la mayor parte de sus conexiones neuronales no se encuentran en su cerebro, sino que en sus tentáculos, hacen pensar que la inteligencia del pulpo funciona de una manera radicalmente diferente a la de otras especies, incluido nosotros, y que su evolución ha seguido ramas completamente separadas.
Algunos investigadores van incluso más lejos, como como el filosofo y aficionado al buceo Godfrey-Smith, quien en su libro “Otras mentes. El pulpo, el mar y los orígenes profundos de la consciencia” explora a través de la investigación del comportamiento en vida salvaje de este animal, potenciales conexiones entre la inteligencia del pulpo y el origen mismo de la conciencia.
Por su parte Sy Montgomery, una de las naturalistas más importantes de nuestro tiempo, también hace su propia exploración que narra de forma muy lírica en su libro “El alma de los Pulpos”, incorporando además una mirada de conexión personal e incluso sentimental con esta extraña criatura.
¿Y qué tiene que ver el pulpo con la minería inteligente?
Creemos que desde la investigación sobre cómo funciona la inteligencia del pulpo se podrían desprender incluso algunas pistas interesantes para el desarrollo de la inteligencia artificial. El hecho de que no tengan un único cerebro central, sino que sus poderosas conexiones neuronales se encuentren distribuidas a lo largo de todos sus tentáculos nos resulta fabuloso e intrigante: Cada tentáculo posee un gran nivel de inteligencia y autonomía, pero estos jamás se enredan entre sí, funcionan completamente sincronizados para solucionar problemas complejos, interoperan y cooperan coordinadamente para cumplir con tareas motrices complejas, en las cuales cada tentáculo juega un rol fundamental para el objetivo común.
Y así como en el pulpo los tentáculos se deben conectar y cooperar para lograr los objetivos comunes, en la minería pasa lo mismo. La minería es un proceso altamente complejo, con múltiples interrelaciones entre sus diferentes procesos. Necesitamos que los diferentes procesos y sistemas se conecten entre sí, intercambien información, para que sus acciones no se entrampen en óptimos locales, sino que en conjunto apunten al óptimo global de la cadena productiva completa. Es por esta razón que el pulpo para nosotros es un fiel reflejo de nuestra visión: lograr la interoperabilidad inteligente de los sistemas mineros.
